La concentración de la actividad humana en núcleos de población; implica una concentración de los elementos en riesgo, para los que resultan totalmente insuficientes los estudios generales de peligrosidad sísmica, por lo que son imprescindibles y urgentes estudios específicos que tengan en cuenta los efectos locales, y los peligros inducidos por los terremotos.
La zonificación sísmica, es el proceso de estimación de la respuesta del terreno bajo la excitación sísmica y, por lo tanto, de la variación de las características de las sacudidas sísmicas en la superficie.
Este proceso consiste en subdividir el área en zonas considerando las características de las sacudidas y de los peligros inducidos (licuefacción, deslizamientos, asentamientos, etc.). La zonificación sísmica consiste en establecer zonas de suelos con comportamiento similar durante un sismo, de manera que puedan definirse allí, recomendaciones precisas para el diseño y la construcción de edificaciones sismo-resistentes